Ciudad de paso porque siempre ha sido un cruce de caminos, un lugar de encuentro en las rutas entre Andalucía y Levante, entre la meseta y el litoral. Y eso es parte de su grandeza. Albacete tiene mucho que ofrecer para recorrerla con calma y descubrir sus secretos pocos conocidos. Te descubrimos algunos de ellos.
El Pasaje Lodares, lugar de visita imprescindible a cualquier hora del día, es uno de ellos. Gracias a su cubierta de hierro y cristal y su luz cenital, cambia su aspecto permanentemente. Las columnas renacentistas que separan los comercios, soportan una arquitectura posmodernista espectacular en la que se filtran cabezas mitológicas, especialmente de Mercurio, Dios del Comercio. Es sin duda la calle cubierta más bella de España.
Los que quieran estudiar estilos arquitectónicos tienen un excelente escenario en la catedral de San Juan Bautista, gracias a los cuatro siglos que llevó su construcción, desde el mudéjar al siglo XX. Sus cuatro columnas renacentistas fueron la causa para parar las obras y son hoy la principal razón para visitarla.
El Teatro Circo tiene un exterior un tanto anodino, pero dentro todo cambia. Sólo hay seis en el mundo y este es el más antiguo y único en España que mantiene una doble funcionalidad escénica y estructural, tanto para teatro como para espectáculos circenses. Además, es sala de cine y teatro de ópera. En él se celebra cada año el Festival Internacional de Circo de Albacete, uno de los más prestigiosos del mundo.
En la plaza del Altozano, la más popular de Albacete, se conserva un refugio antiaéreo construido en 1937 tras el terrible bombardeo que los nazis de la Legión Cóndor. Un conjunto de galerías y pasillos subterráneos que logró salvar la vida de miles de personas durante la guerra, y hoy se ha convertido en un museo vivo de la historia de la ciudad.
Tras una espectacular fachada de estilo modernista y aire gótico con vistosos azulejos verdes, construido en el año 1912 y conocido como Casa de Hortelano, se encuentra el Museo Municipal de la Cuchillería, uno de los tres únicos que hay en Europa. La cuchillería de Albacete es la de mayor prestigio y fama a escala universal desde hace siglos. Hasta marzo de 2026 puede contemplarse la exposición “Navajas con historia: colección Rol”.
No dejes de visitar el Museo Pedagógico y del Niño, situado en la antigua escuela Virgen de los Llanos, cuyo objetivo es rescatar, preservar y difundir el legado histórico de la infancia, la familia y la escuela en Castilla-La Mancha. Globos terráqueos, animales disecados, ilustraciones infantiles, un centenar de bellas linternas mágicas, tebeos antiguos, cochecitos, orinales para bebés o recreaciones de cómo eran las aulas a mediados del siglo XIX y el XX. Un mundo que todos hemos vivido y que forma parte de nuestra propia historia.
Los antiguos Depósitos de Agua de la Plaza del Sol, de principios del siglo XX, es un claro ejemplo de la apuesta de Albacete por conservar sus señas de identidad y recobrar espacios para uso de la cultura en el mundo moderno. Desde 2001 alberga la Biblioteca Municipal, la segunda más importante de Castilla-La Mancha. Por otro lado, los depósitos de agua del Parque de la Fiesta del Árbol, referencia del presente y futuro de la ciudad. Sus más de 70 metros de altura lo convierten en el depósito de agua más alto de España. Es la sede del Centro de Interpretación del Agua de Albacete, concebido como un espacio de conocimiento y experiencias, abierto e innovador.
Estos son solo alguno de los secretos poco conocidos de Albacete, ciudad que si la visitas en septiembre no debes de perderte si Feria Popular que desde hace 300 años enamora a lugareños y visitantes.
Más información:
https://www.turismoenalbacete.com/
Texto: Enrique Sancho
Fotos: Carmen Cespedosa y archivo
