Varias asociaciones vecinales y AMPAS de Fuencarral, entre las que se encuentra la Asociación Barrio de Montecarmelo, de El Pardo y de Mingorrubio, han vuelto a retomar una de las demandas que llevan pidiendo desde hace años: la unión por transporte público (autobús de la EMT) de Montecarmelo con los barrios de Mingorrubio y de El Pardo a través de la M612. El objetivo no es otro que unir a estos barrios hermanos para paliar las demandas de mejorar la comunicación entre ellos y que así los vecinos puedan hacer uso de las infraestructuras y ocio de todos ellos.
Hasta el momento, El Pardo sólo cuenta con dos líneas de autobuses de Alacuber, empresa de transporte interurbano concesionaria de la EMT, que traslada a los vecinos bien hasta Moncloa, con una frecuencia de unos 10-15 minutos, bien hasta el Hospital La Paz, con una frecuencia de cada hora. El trayecto por la M612 en vehículo particular no lleva más de 6-7 minutos, tal y como argumentan las asociaciones.
– “Son muchos los vecinos de Mingorrubio que necesitan conexión con Montecarmelo, bien porque vienen a estudiar al Instituto Blanca Fernández Ochoa, o porque hacen uso de sus líneas de autobuses, como 170, o de las líneas de Metro, tanto la línea 10 como la línea 9 de Paco de Lucía. También es verdad que los dos barrios cuentan con una buena oferta de hostelería y otros servicios pero sin coche no pueden disfrutar de la del barrio vecino”, nos comentan desde la Asociación Vecinal Barrio de Montecarmelo.
Esta iniciativa ha llegado a la Asamblea de Madrid de la mano de Mas Madrid, grupo político que presentó una pregunta en la Comisión de Transportes al actual Director Gerente del Consorcio de Transportes de la Comunidad de Madrid, quien señaló que no era necesaria la creación de una nueva línea de EMT que transcurriera por la M612. Además, las asociaciones vecinales se han reunido con distintas AMPAS de los colegios e institutos de ambos barrios para abordar el tema, ya que el Consorcio de Transportes no considera necesaria la implantación de dicha línea.
– “Creemos que el consorcio se equivoca. Es evidente que se necesita una pequeña línea de autobús para unir estos dos barrios y los servicios que podrían compartir entre ellos: colegios, centro de salud, supermercados, comunicaciones, zonas verdes, etc. Cuando asociaciones y AMPAS opinamos de una forma significa que no estamos pidiendo por pedir”.
