– ¿Con qué ojos afrontan 2023 como asociación?
– “Con ciertas expectativas de cambio puesto que hay elecciones, después de las cuales pedimos que, esté quien esté, designe al distrito un concejal presidente que empatice con el sentir de los ciudadanos y ciudadanas y sus problemáticas, y tienda una mano al tejido asociativo contando con él para ayudarle en su gestión y administración”.
– ¿Qué tres cosas le gustaría que ocurrieran en Montecarmelo en 2023?
– “Que arranquen las obras del centro de salud y del polideportivo municipal, y que éste sea un espacio abierto al barrio; dar más importancia a los jóvenes y mayores, habilitando espacios y actividades; y en urbanismo y movilidad, mejorar la limpieza de las calles y dotar recursos para la mejora y mayor seguridad del tráfico, sobre todo en los entornos escolares. ¡Ah! y algo muy necesario, que la Cabalgata de Reyes vuelva a activarse en nuestro distrito”.
– En mayo, elecciones. ¿Ha sido una buena legislatura para el barrio?
– “Nefasta. Ha estado marcada por el personalismo del concejal presidente, el Sr. Javier Ramírez. No sólo podemos hablar de los efectos de la pandemia en el barrio, también de las decisiones que ha tomado: prohibir una recogida de alimentos solidaria a nuestro tejido vecinal, gastarse más de cien mil euros en banderas en los meses más duros de la pandemia, eliminar la Cabalgata de Reyes, cambiar nombres de plazas y calles con elementos históricos y propios del distrito… Seguimos sin los equipamientos que prometió la nueva corporación. Y eso es un hecho objetivo”.
– ¿Cómo definiría la legislatura?
– “No han hecho nada positivo, tal vez el asfaltado, pero eso es algo necesario. La anterior nos trajo: escuela infantil municipal, instalación básica deportiva, centro de ocio juvenil, aprobación de una biblioteca o el desbloqueo de la parcela del instituto, que en esta legislatura se está eternizando su construcción. Lo que iba a ser una biblioteca será un centro cultural”.
– ¿Qué se podría haber hecho y no se ha hecho?
– “Seguir con la línea de arrancar los equipamientos pendientes, agilizar las obras ya iniciadas, ampliar la oferta de espacios, implantar medidas de pacificación del tráfico, contar con el tejido asociativo o apoya el Consejo Territorial del distrito, espacio totalmente ninguneado por Ramírez”.
– ¿Por qué cree que no se han llevado a cabo?
– “Por pura voluntad personal del concejal y en el caso de nuestro alcalde, por mirar hacia otro lado”.
– ¿Cuál ha sido la actuación “estrella” de Montecarmelo?
– “Desde hace años ha sido la falta de un Instituto, que en esta legislatura ha tenido continuos retrasos en el arranque de las obras, que comenzaron en febrero. Esperemos que no haya más”.
– ¿Cómo calificaría la comunicación con la Junta de Fuencarral?
– “En algunas áreas, correcta y fluida, como con educación, servicios sociales, participación y cultura. Llevamos años trabajando con el personal funcionario de esas áreas y la relación es perfecta”.
– ¿Y con el Concejal Presidente?
– “Una persona que no vive en Madrid ciudad, que orgánicamente pertenece a otro distrito y que se niega a trabajar junto con el tejido asociativo, sea el que sea, solo trae una total falta de comunicación”.
– ¿Y con los otros grupos políticos? ¿Se han mostrado interesados por las preocupaciones de los vecinos de Montecarmelo?
– “Con todos hemos trabajado muy cómodos, nos han escuchado e intentado llevar nuestras demandas a los plenos. Tenemos muchos problemas comunes que carecen de ideología, pero, a veces, las decisiones se toman en otros niveles y son bloqueadas”.
– A nivel de asociación, ¿qué momento de esta legislatura escogería?
– “El trabajo que hicimos en “Filomena” coordinando a vecinos propietarios de vehículos 4×4: trasladamos a sanitarios, ayudamos en accidentes y a personas bloqueadas en carreteras y, lo más gratificante, desplazamos a una vecina embarazada que dio a luz al que llegar al hospital gracias a nosotros”.
– ¿Qué espera de la próxima legislatura para Montecarmelo?
– “Que nos pongan en el mapa y que resuelvan todas las necesidades que como barrio tenemos”.